14 de septiembre de 2012

Todavía no aprendo como dormir sin medias

El tiempo. Siempre que voy a empezar a escribir algo me ubico en algo así como una linea imaginaria de tiempo. Pienso qué estaba haciendo un día como hoy, 14 de septiembre hace dos meses atrás. Hace 4 meses atrás. Hace un año atrás. Y me paralizo. Intento comprender por qué pasan las cosas o cómo fue que se dieron en ese orden todo lo que me pasó desde el 14 de Septiembre del año pasado a este. Pero por más que lo piense, lo re piense y me lo imagine, no encuentro respuesta.
Y digo, por un lado está bueno que la vida nos sorprenda, por que eso es lo que la hace interesante. Pero por otra parte, sería un poco mejor que podamos tener un par de pistas de lo que va a pasar en el futuro, o no?. Quienes creen en el destino, me van a decir que no, que no podemos controlar lo que va a pasar, que de alguna forma, todo está escrito en el "gran libro de la vida". Y en parte yo también creo en eso, creo que por algo pasan las cosas, algún motivo debe tener. Y es por eso que me sorprende como pequeños detalles o acciones que hacemos puedan cambiar las cosas tan radicalmente.
Si están todavía leyendo esto y están acá, seguro se preguntaran que carajos me tome o me fume o por que la estoy flasheando así. La respuesta es NADA. Lo que pasa es que me puse a observar mi vida desde afuera para poder explicar(me) por que estoy como estoy ahora.  Y es ahí donde los "Si hago esto" o "Si hubiera hecho eso" salen a la luz, y me enloquecen aún más. "No te arrepientas de nada de lo que haces" me dijeron una vez, y todavía no me arrepiento de nada, pero la ansiedad que tengo de hacer más cosas o de poder realizar lo que quiero es lo que en realidad me desespera. Pero eso es un tema largo y complejo que no quiero abordar, por que como ya dije al principio, no tengo respuesta.
Lo que quiero explicar ahora es por qué digo que todavía no aprendo a dormir sin medias. Códigos. Habrán escuchado mucho eso no?. "Tener códigos entre los amigos" o simplemente entre personas. Codificar algo para que solamente quienes codificaron eso pueda comprender. Esto de que no puedo dormir sin medias puede ser totalmente decodificado por una sola persona, que está del otro lado del océano atlántico, que ni siquiera habla el mismo idioma que yo ni comparte la misma hora terrenal, pero que se, que si él llegara a leer que todavía no puedo dormir sin medias, se dibujaría una sonrisa picarona en su cara, recordandole incontables momentos. Yo supongo que sería la misma sonrisa que tengo yo ahora al escribir estas palabras. Creo que él también tendría esa sensación que tengo ahora, la de sentir su respiración, oler su perfume, escuchar sus latidos del corazón y sentir todo su cuerpo tan cerca mio, abrigándome del frío mes de Diciembre de un invierno en Suecia. Pero eso es lo que yo creo, lo que imagino, lo que quiero pensar que él haría. Esa es mi visión de su mundo. Pero la triste realidad me dibuja otra cara. Seguramente, el jamás lea estas palabras, y aún más seguro, yo nunca le voy a preguntar lo que siente, si todavía se acuerda de ese invierno, si significa lo mismo para él.
¿Por qué?. Tampoco sé. O sí se, y son muchos los porques. Porque él, ya no es el mismo él. Porque quizás mi pregunta este de más o muy fuera de lugar. Por tal vez, el pase su frío diciembre debajo de otros acolchados, en otras camas abrazando a otras chicas, mientras yo voy a vivir un diciembre caluroso, lejos de él,  y de nuestro primer aniversario que tendría que ser, pero no va a saber. Aunque (y de nuevo, sito a el tiempo) estamos en Septiembre, y todavía faltan tres meses en los que no se qué podría pasar.
Hoy leí que una persona tipo tarda 17 meses en olvidar a su ex. Yo soy una de las personas menos normales que conozco. (No es que yo me haya titulado así, todos los que me rodean me lo repiten día tras día). Ya pasaron 7 meses desde que cortamos. 4 meses desde la última vez que dormimos juntos. 125 días desde la última vez que nos besamos. 29 días desde la última vez que hablamos. No hay día que no piense en él. Que no sueñe con él. Pero a pesar de todo, no quiero mandarle un mensaje, no quiero llamarlo. Quiero estar en sus brazos, agarrar su mano, sentir su respiración, escuchar sus latidos. Quiero estar con él. 

El otro día leí que la distancia no separa a los amantes, si no que llena el espacio que hay entre estos dos con pasión y esperanza.

Yo estoy predispuesta a dar todo por él, a esperar por él, a viajar por él. A llevar a cabo el plan que ideamos juntos alguna vez. Pero me pregunto, será que él también?.

Pero si no me animo a preguntárselo, cómo voy a saber?.

Quizás el día que duerma sin medias me voy a dar cuenta que ya está. Que ya fue. Que eso que tanto quiero, al fin lo liberé. Y el día que vuelva, si es que vuelve, volverán entonces las medias también.


PS: el fucking blogspot no me deja subir fotos :/.
PS2: la fucking fuckultad(universidad) no me deja en paz con todo lo que tengo para estudiar. Extraño bloggear :(